De vuelta en casa, son ya las 01.42 y el jet lag me tiene envuelta en esta noche eterna. Escuchando a Steve Perry con su incansable foolish heart...que me gusta tanto. Siento ganas de escribir tantas cosas y no se por donde empezar. Quiero cerrar heridas pero tengo esa incrustada sensación de que nunca lo lograre por temor a que ya nadie recuerde de que estoy hablando; sigo postulando al tiempo como mediador de ese conjunto de cosas, que quiero sepultar, necesito avanzar. Tengo ganas de abandonar el estres del retorno y disfrutar mi viaje, ahora con los recuerdos siempre es mejor. Esta experiencia en china me hace ver las cosas de otra forma. Cada cosa que va pasando en mi vida, va inundando mi alma de felicidad...es imparable sentir que me elevo, casi como si fuera un gigante, sin limite de espacio , veo todo desde otra forma, con sus detalles y entorno. No puedo volver a atrás, sigo avanzando en este torbellino de cosas maravillosas que van ocurriendo una y otra vez. A veces pienso que mi vida terminara pronto, no se si alguien puede vivir en este estado de éxtasis todos los días hasta los 80 y tantos...en realidad no importa cuando tiempo respire, si ha sido tan maravilloso y lleno de color...nunca acaba esta sensación de plenitud y como sea.....me tiene feliz todo el rato.
Clau
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